Artista ¿en Guáimaro?
- Publicado por: admin
- 03 / 30 / 2010
-No importa si se vive en La Habana, Nueva York o Guáimaro si se quiere hacer arte. En eso coincido con Carlos Gondres Migüel, quien me remarca que “no hace falta ser periférico o citadino para hacer algo de sentimiento artístico”.
En la Cuna de la Constitución él y su hermano Luis Lorenzo legaron obras por algunas instituciones y destierran con cada escena de galería local o de salones extrafronteras el enfoque que lastra la creación en los municipios.
Unirse con artistas de aquí es una forma de supervivencia lejos de las altas luces, por eso los hermanos Gondres apuestan por la modestia y brindan trabajos conjuntos para el embellecimiento de la ciudad.
El Taurino surgió como un proyecto de varios autores que sin proponérselo dieron con la cabeza de miura rojo el sello ganadero que estaba ausente de la localidad.
“No sé si Guáimaro es mi punto de partida o mi punto de llegada. Vinimos en un momento a hacer un cumplido: nuestro servicio social. Vivíamos aquí y nos empezamos a enrolar con los aficionados de la Casa de la Cultura. Nos encargamos de la formación de otros y nos llenó de responsabilidad”, por eso Carlos no saca sus raíces del terruño y junto a otros moldeadores proyecta una estatua para las madres, esas que no llevan rostro angelical y sí jabas y a un niño a la escuela al más puro estilo cubano.
Luis Lorenzo almacena sus miniaturas de barro, como un ceramista convencido de la variedad de sus figurillas horneadas, que merecieron varios premios en salones de pequeño formato: “Empecé como artesano en las jornadas Cucalambeanas y después en los salones de Guáimaro. Entre 1996 y 1997 alcancé premios consecutivos en los salones de artesanía de Las Tunas y eso me dio la posibilidad de asistir a ferias en representación de Camagüey”.
Fundador del grupo de miniaturas que surgió en el 2008, su obra es primitivista, busca el detalle por su condición autodidacta y entre las últimas exposiciones hizo una conjunta con artistas locales en la galería de Roberto Fabelo en La Habana Vieja: “Para estar dentro del grupo —porque era instalativo— llevé dos piezas en busca de una armonía de acuerdo con su pequeño tamaño.
Siempre he sido figurativo, me gusta la figura humana.“Nosotros buscamos detallar y llevar la realidad, además mis temas son diferentes a los de mi hermano Carlos.
Trato el tema folclórico, lo tradicional y lo popular, todo imbricado.
“El folclor de aquí es campesino, por eso una de mis figuras es el guajiro que protege elementos dentro de su maleta que es como un carromato. Bohemio en la ciudad es un hombre con mochila, de esos que viven fuera y regresan al parque de Guáimaro”.
Fuente: Adelante.cu
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